Un Dia Como Hoy...

1786
Nace el Dr. José María Vargas

El 10 de marzo de 1786 nace en La Guaira, Venezuela, el médico venezolano José María Vargas, presidente de la República en 1835-1836. Preocupado por la investigación científica y los problemas de su país, ejerció como médico en diferentes hospitales del oriente del país, fue profesor y rector de la Universidad de Caracas, participó en las luchas por la independencia y fue encarcelado por los realistas. Partidario de la secesión de Venezuela, entonces integrada en la República de la Gran Colombia, asistió al Congreso Constituyente de 1830 que proclamó la independencia del país. En 1835 fue elgido presidente de la República, aunque la revuelta de Santiago Mariño le obligó a salir del país y a dejar a José Antonio Páez la dirección del Ejército constitucional. Sofocada la rebelión, regresó a su puesto, pero renunció a él en abril de 1836, para dedicarse a su profesión. Posteriormente, fue director general de Instrucción Pública (1839-1852). Murió en Nueva York, el 23 de Agosto de 1854.

1945
Bombardeo de Tokio

El 10 de marzo de 1945, 300 bombarderos estadounidenses arrojaron casi 2000 toneladas de bombas incendiarias sobre Tokio, Japón, que destruyeron extensas porciones de la capital japonesa y mataron cien mil civiles. El ataque formó parte del esfuerzo de los EE.UU. para provocar la rendición de Japón en los últimos meses de la Segunda Guerra Mundial. La conflagración causada por las bombas incendiarias rápidamente envolvió las estructuras residenciales de madera de Tokio, creando una tormenta de fuego que reemplazó al oxígeno por gases letales, recalentó la atmósfera y causó algo similar a vientos huracanados que soplaron una pared de fuego a lo largo de la ciudad. Como resultado del ataque, 10 millas cuadradas de Tokio Este fueron enteramente arrasadas y un número estimado de 250 mil edificios fueron destruidos. En los siguientes nueve días, los bombarderos de EE.UU. volaron en misiones similares sobre Nagoya, Osaka y Kobe. En agosto, los ataques atómicos de EE.UU. contra Hiroshima y Nagasaki finalmente lograrían torcer el brazo del Japón.