El ex piloto de Fórmula Uno austríaco Niki Lauda, propietario de la aerolínea austríaca Fly Niki, calificó hoy como el "peor error de la historia aeronáutica" la decisión de cerrar el espacio aéreo de Europa por la nube de cenizas del volcán islandés Eyjafjalla.
La clausura del espacio aéreo en gran parte de Europa es "una medida totalmente exagerada (tomada) sin datos (científicos)", dijo Lauda en una rueda de prensa en Viena.
El empresario exigió que los países europeos tomen como ejemplo a Austria y entreguen la responsabilidad de los despegues y aterrizajes de aviones a las líneas aéreas.
Las autoridades austríacas decidieron reabrir a partir de las 06.00 hora local (04.00 GMT) de hoy el espacio aéreo sobre la república alpina.
Lauda, quien pilotó personalmente un vuelo de prueba el domingo, reiteró que la nube de cenizas tiene una intensidad tan baja que no constituye peligro alguno para los aviones.
En su vuelo entre Viena y Salzburgo voló "durante dos horas en medio de la nube" y "como era de esperar no hubo ningún tipo de daños". "El cierre fue completamente innecesario", concluyó.
Según Lauda, la decisión de cerrar el espacio aéreo se hizo sin disponen de datos científicos. "Fue una decisión intuitiva", aseguró el triple campeón de Fórmula Uno, cuya línea aérea ha perdido en los últimos cuatro días entre ocho y diez millones de euros.
Como ejemplo de que no siempre los volcanes son peligrosos para la aviación, Lauda destacó el Etna en Sicilia, a donde se puede volar incluso cuando el volcán está activo.