La Administración de Obama ha concluido que los actuales pronósticos para los proyectos Ares y Constelación no tienen razón de ser. En lugar de enfocarse en regresar a la Luna y en desarrollar tecnología para la baja órbita terrestre, la administración propone que estas tareas sean encomendadas a entidades comerciales tales como la X Prize Foundation y otras organizaciones emprendedoras.
El actual programa del transbordador espacial llegará a su fin, mientras que las misiones rusas de la Soyuz continuarán apoyando las futuras misiones a la Estación Espacial Internacional. La NASA se enfocará en el espacio profundo, en la robótica y especialmente en la ciencia de la Tierra y en los cambios climáticos.
Los cambios propuestos autorizan a las empresas libres americanas a invertir más lejos, compitiendo por este nuevo mercado. Fondos adicionales del gobierno serán proporcionados para aquellos que se aventuren al nuevo reino de la exploración espacial, con la ventaja añadida de la creación de nuevos trabajos.