La piel masculina es más resistente que la femenina; sin embargo, esto no la exime del cuidado para mantenerse en buena condición estética y de salud.
Debido a la estimulación producida por las hormonas masculinas, el hombre tiene la piel más grasa y un 25 por ciento más gruesa que la mujer. Si bien esto hace que los varones resistan mejor las agresiones del medio ambiente, también es la causa por la cual se descuidan a tal punto que terminan con una dermis en mal estado.
“Al no darse cuidado vienen los embates propios del medio donde estamos, como el sol, el medio ambiente, el estrés y el smog, que hacen que el hombre se vea descuidado”, explica Roberto Rodríguez, de Soluciones Estéticas.
Además, el hombre se rasura con frecuencia, haciendo que la capa más externa de la piel se descame y sea propensa a sufrir por las agresiones citadas.
“La queratina es la parte más superior de la piel”, explica Rodríguez. “En el afeitado descamamos esa piel a veces sin que ese queratocito haya alcanzado su madurez, entonces la piel queda al descubierto más fácil”.
Sin caer en los excesos ni en la clasificación de “metrosexual” -pues, como dice Rodríguez, unos hombres se cuidan poco y otros demasiado-, existen cuidados básicos que el varón debería adoptar para prevenir daños.
Pero ¿hablarle a un hombre de rutinas que vayan más allá del afeitado y el baño? Eso es casi como mencionarle al diablo la cruz. Y aunque esta situación, genera un machismo que interpreta la estética como un síntoma de poca hombría, ha ido cambiando poco a poco, no está de más recordar las pautas a seguir. Según Rodríguez, en el kit básico de cuidados masculinos no deben faltar un jabón sin olor, gel o leche limpiadora para eliminar del rostro impurezas como sudor, polvo y sustancias tóxicas. Puede ser, si lo prefiere, un jabón en barra de avena o de miel.
Recomienda además un tónico que tapona los folículos para que retengan el agua, un hidratante con filtro solar y una exfoliación suave una o dos veces por semana.
“Los hombres hacemos mucha más fuerza física, eso lleva calor y produce sudoración y toxinas que hay que quitar; si las dejamos acumular sobre la piel, tiende a formarse una piel áspera, se taponan los folículos y se encarnan vellos”, dice Rodríguez.
Desaconseja el uso de jabones de olor para afeitarse, pues los colorantes y perfumes que contienen son fácilmente absorbibles por la piel descamada y reaccionan con el sol provocando manchas.
Los productos que contengan alcohol, como los antiguos alcoholados usados con el objetivo de prevenir infecciones tras el afeitado, entran también en la lista negra.
“Ahora no se usan alcoholados, sino cremas calmantes y filtro solar con hidratación -dice el médico- y el hombre está aprendiendo a usarlos porque el kit completo viene así: un buen jabón de PH neutro, una crema calmante y una navaja de afeitar desechable”.
PARA EL RESTO DEL CUERPO...
A diferencia de las mujeres, los hombres suelen andar con prácticamente toda la piel del cuerpo cubierta, pero no por ello deben descuidarse.
Más allá de la estética, lo importante para ellos es el aseo, el ejercicio y la buena alimentación, así como dejar a un lado hábitos dañinos como el alcohol y el cigarrillo.
“La piel retrata lo que pasa dentro y el hombre tiene que cuidar su organismo entero, no es solamente lavarse como si la piel fuera un órgano externo”, concluye Roberto Rodríguez.