En la actividad inaugural se percibía el ritmo de tambores y platillos que motivó la danza de un grupo de lugareñas que se prepararon para la ocasión antes de que los propulsores terminaran de ofrecer las declaraciones a la prensa nacional e internacional de todo lo que se tuvo que hacer para eliminar la contaminación de un barrio que fue calificado por un organismo internacional como el tercero más contaminado del mundo.
Una comisión formada por miembros de Medio Ambiente, del Instituto Blacksmith de Nueva York, la Alcaldía del municipio de Haina y la Fundación Niños Libres de Plomo de República Dominicana (Funiliplo) entregaron a la comunidad Paraíso de Dios totalmente libre de contaminación, el terreno donde funcionaba una fábrica de baterías.
El viceministro de Medio Ambiente, Ernesto Reina, manifestó que esa entidad invirtió más de RD$10 millones para remover toda la tierra contaminada del lugar donde funcionaba la empresa y que en lo adelante la Alcaldía de Haina dotará de alumbrado y asientos para convertirlo en un parque que sirva la recreación de las familias.
“Hace tres años la comunidad Paraíso de Dios de Haina se convirtió en noticia luego de que se detectara uno de los más grandes focos de contaminación por plomo de todo el planeta, provocado por la planta de reciclaje de baterías Metaloxa, que vertió en el subsuelo una gran cantidad de desechos tóxicos, afectando a los habitantes de la zona”, expresó.
El funcionario manifestó que luego de la descontaminación de más de 10 metros cúbicos de tierra y la inversión millonaria, el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales concluyó los trabajos que eliminan el mayor foco de contaminación del área.
Agregó que en lo sucesivo las zonas adyacentes serán objeto de los trabajos requeridos para su limpieza total, ya que todavía quedan remanentes de plomo en algunos lugares.
La presidenta de Funiliplo, Sandra Castillo, quien es residente en el lugar y fue la principal gestora de este proyecto donde participaron los expertos Steve Null, Ramón Tallaj y otros colaboradores extranjeros, expresó que ahora las autoridades deben dotar lo que será el parque de Paraíso de Dios de lámparas, asientos y seguridad permanente por la delincuencia que impera en la zona.
Los niños brincaban emocionados en el terreno a ser habilitado, pues ahora cuentan con un espacio de recreación favorable para hacer deportes, entretenerse y descansar libremente.