Mientras se toman las previsiones acostumbradas, las autoridades locales ordenaron hoy, el cierre de todas las escuelas de la ciudad, debido a la poderosa tormenta que se está desarrollando en el área desde tempranas horas de la noche del martes.
Los planteles católicos y privados asumieron la misma medida y en la mayoría de universidades, las clases podrían ser también suspendidas. Las agencias municipales dijeron que están listas para enfrentar el fenómeno, que se prevé, trastornará todas las actividades normales del área metropolitana y en suburbios situados en territorios más vulnerables, donde se espera una situación crítica.
El Departamento de Sanidad comenzó a disponer desde anoche de 365 camiones repartidores de sal y otros 1, 600 vehículos equipados con palas mecánicas. Más de 100 mil toneladas del mineral también estaban en las calles, avenidas y carreteras.
La Autoridad de Puertos de Nueva York y New Jersey dijo que estaba lista para trabajar con el equipo adecuado y mantener despejados los aeropuertos, puentes y túneles.
Parte de esos equipos están en capacidad de limpiar nieve en las terminales a razón de 35 millas por hora, otros licúan hasta 500 toneladas del hielo por hora. Las autoridades recomiendan a los neoyorquinos que si no tienen absoluta obligación de estar en las calles, no salgan de sus casas hasta que la tormenta amaine.
Lo que viene
Entre el augurio de los especialistas sobre el impacto de la tormenta en Nueva York se dijo que a partir de la media noche del martes, hasta las 3:00 de la mañana del miércoles comienzan a caer los primeros copos de nieve.
El viento aumentará entre 15 a 20 mph y podríamos tener acumulaciones de hasta 2 pulgadas.
Las carreteras estarán resbalosas, calles secundarias y aceras con hielo. Comenzarán a aumentar las demoras en aeropuertos.