Al menos 113 personas murieron en el archipiélago de las Samoa y en las vecinas islas Tonga, tras el poderoso sismo de magnitud 8 que provocó luego un maremoto, según fuentes médicas y autoridades.
Además, decenas de personas están desaparecidas y las comunicaciones se hallan cortadas en numerosas localidades. Varios pueblos costeros y hoteles de turistas fueron devastados, según testimonios.
El sismo, de una magnitud de 8 grados, según el instituto geofísico estadounidense (USGS), se produjo a las 06H48 locales del miércoles (17H48 GMT del martes) y su epicentro fue localizado a unos 200 km al sudoeste de Apia, según un informe preliminar del USGS.
El terremoto fue seguido por un tsunami unos veinte minutos más tarde.
El fenómeno afectó al archipiélago de Samoa, que integran el Estado independiente de Samoa, con unos 219.000 habitantes, y las islas Samoa estadounidenses, administradas por Washington, con unos 65.000 habitantes. El presidente norteamericano Barack Obama declaró el estado de catástrofe en las Samoa estadounidenses.
El primer ministro de las Samoa, Tuilaepa Sailele Malielegaoi, declaró estar "totalmente conmocionado".
"Han muerto tantas personas. Estoy tan conmocionado, tan triste por esas pérdidas", declaró.
Varios testigos indicaron haber visto llegar muros de agua de 3 a 9 metros, que barrieron pueblos y hoteles.
Una turista extranjera relató su fuga de un bungalow en la playa.
"Olas inmensas llegaron y corrimos hasta nuestro vehículo. Tratábamos de abrir la puerta cuando llegaron las olas. Finalmente lo conseguimos pero el agua lo invadió todo", relató la mujer a Sky News.
La región más turística de las Samoa quedó "devastada", declaró el viceprimer ministro Misa Telefoni, citado por la agencia australiana Associated Press.
Dijo que dos de los hoteles más frecuentados, el Sinalei Reef Resort y el Coconuts Beach Resort, en la costa oeste de la principal isla de Upolu, habían resultado gravemente dañados.
"El balance probablemente va a agravarse ya que numerosas víctimas no fueron registradas debido a problemas de comunicación", declaró Talutala Mauala, secretario general de la Cruz Roja.
Según un periodista local, Jona Tuiletufuga, "pueblos enteros fueron devastados. Tenemos informaciones de desaparecidos en las zonas mas afectadas, en las costa sur y sudeste".
El agua llegó hasta 800 metros tierra adentro, según testimonios. La mayoría de los daños parecen concentrarse en el sur de las Samoa, golpeado por olas de seis a ocho metros, según varias fuentes.
Por su lado, el archipiélago de las Samoa estadounidenses ha sido "devastado", afirmó el delegado de Samoa en el Congreso norteamericano.
"Hubo un terremoto que causó un maremoto de 4,5 metros de altura. Algunas áreas están justo por encima del nivel del mar, por lo que ya se puede imaginar la devastación", dijo Eni Faleomavaega a la AFP, en una entrevista telefónica.
"El terremoto causó grandes daños, hay coches flotando por todos lados", dijo, confirmando las informaciones de que miles de personas habían perdido sus hogares.
La agencia federal norteamericana para situaciones de crisis (FEMA) decidió enviar a dos equipos de socorro al archipiélago estadounidense.
Ahora la prioridad es despejar las carreteras costeras, dañadas por el terremoto y el tsunami, para llegar hasta las zonas afectadas, dijo un portavoz del primer ministro de Samoa.